Los cuidados con perspectiva de género han centrado este viernes, 14 de octubre, la conmemoración del Día de la Mujer Rural 2022 que, organizado por la Federación de Asociaciones de Mujeres Sol Rural, se ha desarrollado en el Centro Cultural de La Barca con el lema «Por un sistema de cuidados con perspectiva de género».
Inicialmente, una mesa compuesta por autoridades, en concreto, la presidenta de Sol Rural, Francisca Gago, el delegado Territorial de Agricultura David Gil; la diputada de Igualdad y vicepresidenta III de Diputación, Carmen Collado; la delegada de Igualdad del Ayuntamiento de Jerez, Ana Hérica Ramos; Blanca Merino de la Torre, representante del Instituto andaluz de la Mujer (IAM); y el alcalde de la Barca de la Florida, Alejandro López Valenzuela, dio la bienvenida a las personas participantes.
Como cada año, la Federación Sol Rural glosó las reivindicaciones 2022 de todas las mujeres rurales, centradas en todos los ámbitos, desde los espacios y locales públicos para reunirse y no sentir «que se les arrincona», hasta el empleo, el medio ambiente, la educación, las comunicaciones y también el reconocimiento de las mujeres rurales en su diversidad, «pues las mujeres rurales no sólo somos agricultoras y queremos aparecer en el Estatuto de la Mujer Rural con la diversidad que nos caracteriza».
En cuanto a las ponencias, centradas en la necesidad de contemplar los cuidados con perspectiva de género, la primera de ellas corrió a cargo de Sara García, que ofreció datos de la situación de la mujer después del Covid con respecto a los cuidados; y la segunda a cargo de Ángeles Briñón, que abordó la situación real de la dependencia y la necesidad de un sistema estatal en consenso con la población demandante. Por su parte, el delegado del Medio Rural, Jesús Alba, describió los logros y realizaciones ya ejecutados con respecto a las demandas de las mujeres rurales.
Finalmente, uno de los momentos más emotivos fue la entrega del premio Lideresa a la presidenta de la Asociación de Mujeres Progresistas Las Rosas de Guadalcacín, por su dedicación de toda una vida a la liberación y empoderamiento de las mujeres de su asociación, y también de la propia SOL RURAL de la que fue vicepresidenta.
